THE OCEAN RACE
“GUYOT ENVIRONNEMENT-TEAM EUROPE” LUCHAR POR LA REMONTADA EN AARHUS
Esta noticia se publica en nombre de “GUYOT environnement – Team Europe”
La montaña rusa emocional de “GUYOT environnement – Team Europe” ha terminado.
Tras la desarboladura cerca de la costa estadounidense, la llegada al puerto de Halifax (Canadá) y el envío del yate a Europa, la participación del equipo en la Ocean Race era incierta. Había que aunar logística, construcción del barco y finanzas. Hubo días de altibajos, momentos de emotivos giros en U, un cambio constante de ¡sí y no!
Pero ahora está claro: “GUYOT environnement – Team Europe” continuará la aventura de esta regata alrededor del mundo. El barco está en el astillero Knierim de Kiel, el equipo técnico y diez expertos internacionales en construcción naval trabajan día y noche en el casco, el mástil, los foils y el timón. Los problemas logísticos se han resuelto con la ayuda del GAC Pindar, y la brecha financiera se ha salvado gracias al apoyo común y la solidaridad de muchas partes interesadas en la regata.
El plan es el siguiente: llegaremos a Aarhus y afrontaremos las etapas sexta y séptima de The Ocean Race.
La tensión emocional desde la desarboladura el 9 de mayo entre todos los miembros del equipo fue enorme. Las lágrimas fluyeron cuando la tripulación en tierra pudo abrazar a la tripulación en Halifax el 14 de mayo. Pero la carrera contra el tiempo y los costes no había hecho más que empezar. Se actuó con rapidez y se embarcó el barco rumbo a Europa. Durante la travesía se examinaron opciones, se descartaron y se hicieron nuevos planes. Se establecieron redes internacionales, se convocó a expertos en construcción naval y finalmente se concretó el plan de reparar el barco en los astilleros Knierim de Kiel.
«Este regreso sólo es posible gracias a una gran colaboración entre la familia de The Ocean Race, todos los cuales trabajaron increíblemente duro en los diferentes niveles para ayudarnos a volver a la regata. No se trataba sólo de si la reparación era técnicamente posible en el ajustado plazo de tiempo, sino también de establecer la financiación para ello», informa el director del equipo, Jens Kuphal. «Recibimos apoyo de todas partes. La Ocean Race se comprometió con nosotros y todos los demás equipos nos ayudaron».
«Damos las gracias especialmente a “Biotherm”, que demostró una solidaridad y un espíritu deportivo inigualables al proporcionarnos lo que más necesitábamos. El equipo “11th Hour Racing Team” hizo todo lo posible para ayudarnos a adquirir su mástil de repuesto en condiciones muy favorables. El “Team Holcim-PRB” también contribuyó a ayudarnos a llegar hasta aquí. Pero la verdad es que todos nuestros amigos de los equipos contra los que competimos normalmente se han unido para darnos esta oportunidad de volver a la línea de salida en Aarhus. Y nada de esto habría sido posible sin el liderazgo y las contribuciones de la organización de The Ocean Race.
«Durante las dos últimas semanas nuestro equipo se ha unido aún más. Tras el abandono de la etapa del Océano Antártico, la desarboladura fue el segundo varapalo. Pero volvimos a levantarnos», dice Kuphal y resume: «Queremos hacer posible lo imposible una vez más y llevar el barco a la línea de salida en Aarhus».
El patrón Benjamin Dutreux lo confirma: «Las decisiones no fueron fáciles de tomar. Durante los últimos 15 días, hemos mantenido muchas conversaciones con un gran número de actores para ver hasta qué punto sería factible volver a participar en la regata desde un punto de vista financiero, porque es un desafío logístico costoso, ha habido muchos daños a bordo, así que no era sólo un desafío técnico, teníamos que encontrar mucho apoyo para poder recuperarnos. Por supuesto, tuvimos que considerar el hecho de que participaremos en la Transat Jacques Vabre en octubre. Inevitablemente surgió la cuestión de parar la regata. Esta opción siempre ha sido la última. Ha sido como una espada de Damocles pendiendo sobre mi cabeza desde la desarboladura, pero en el fondo estaba convencido de que íbamos a encontrar las soluciones necesarias para volver a la regata». Dutreux explica además: «Hemos instalado nuestro campamento base allí, en el astillero de Knierim. La parte alemana de la campaña tiene contactos locales y pudo organizar mano de obra de apoyo para poder reparar el barco en cinco días.»
Gunnar Knierim y Steffen Müller, jefes del astillero Knierim de Kiel, lo explican: «Estamos preparados para semejante misión de bomberos. En eso consiste nuestro trabajo. El pensamiento económico pasa aquí a un segundo plano. Cuando el yate llegó aquí, nos pusimos a trabajar con todo entusiasmo. Es estupendo participar en este proyecto. Por fin vuelve a haber un barco de carreras de verdad en la sala».
Thomas Cardrin, jefe del equipo Teach, resume todos los desafíos técnicos: Cuando se rompió el mástil, el casco, los foils y los timones también sufrieron daños. Ocho constructores trabajan día y noche en dos mamparos. Hay que reparar la suspensión de la quilla, lo que obliga a otros dos constructores a trabajar durante tres días. El mástil en blanco del “11th Hour Racing Team” necesita ahora que se le instale el cableado y el equipo técnico (por ejemplo, el radar y el Oscar) y se adapte al barco. La vela mayor de repuesto necesita sables nuevos. Los trabajos ya han avanzado considerablemente en los últimos días, por lo que está previsto sacar el yate de la nave del astillero el lunes y colgar la quilla y los foils. El lunes por la tarde se pondrá en el agua en el Canal de Kiel, para que el martes se pueda colocar el mástil e izar las velas.
Benjamin Dutreux resume: «Pero aquí estamos, las piezas del puzzle se han encajado y hemos dado el Go. Vamos a tener que luchar aún más en los próximos días para llevar a cabo esta misión comando y llegar a la salida en Aarhus, ¡pero estamos más decididos que nunca!».
FUENTE Y FOTOS:
Guyot environnement-Team Europe
Gautier Lebec
Charles Drapeau