Home Vendée Globe VENDÈE GLOBE 2024. !A TODA VELOCIDAD!
Vendée Globe

VENDÈE GLOBE 2024. !A TODA VELOCIDAD!

VENDÈE GLOBE 2024

¡A TODA VELOCIDAD!

Si bien los líderes aceleraron el ritmo a mediodía de ayer, los siguientes barcos no tardaron en seguir su ejemplo, hasta el punto de que este miércoles por la mañana gran parte de la flota navega a una velocidad media superior a los 20 nudos. Hay que decir que las condiciones en el agua son idílicas, con un viento que sopla regularmente entre 18 y 20 nudos en mar llano. Sin embargo, aunque la situación es estimulante, promete ser efímera. De hecho, en las últimas clasificaciones, las velocidades supersónicas de los líderes ya han empezado a bajar un poco. Y con razón, ya que se preparan para entrar en los famosos Doldrums esta tarde.

¡Está bombardeando ahí fuera, como diría Sam Davies! Impulsado por un oleaje remanente del norte, el barco supera a menudo los 30 nudos. La vida a bordo no es tan agradable como en los últimos días, ¡pero el espíritu competitivo está siendo mimado!”, ha declarado el patrón del “Biotherm”, Paul Meilhat.

Por su parte, Sébastien Simon confirma: “Las condiciones son perfectas para poner en marcha la máquina. Avanza por sí sola. Así que la dejo expresarse”. Lo cierto es que desde el mediodía de ayer, los patrones del “Biotherm” y del “Groupe Dubreuil”, al igual que sus rivales, han alargado considerablemente el paso gracias al regreso de los alisios, esos famosos vientos constantes de las regiones intertropicales que habían abandonado literalmente el Atlántico Norte desde mediados de la semana pasada, debido a una baja cortada situada al norte de Madeira (una zona aislada de bajas presiones en la troposfera, rica en aire frío y separada del flujo principal del chorro polar). “En las últimas cuatro horas, la mitad de la flota ha alcanzado una media de 20 nudos, ¡incluso 25! Hay un verdadero puñado de navegantes por aquí”, explica Pierre Hays, asistente del Director de Regata.   

Los Doldrums, un origen controvertido

Para los navegantes en solitario, el reto en estos momentos, aparte de ganar millas en la ruta, es sobre todo afinar su punto de entrada en los Doldrums, la famosa zona de convergencia intertropical. Aunque no hay una explicación clara para su nombre (algunos lo ven como una referencia a las tormentas que oscurecen la luz, otros a los barcos que atravesaron el Atlántico en la trata de esclavos africanos y unos pocos sostienen que existe un vínculo con el juego del farol del ciego), tampoco hay una explicación real para su evolución. “Es un campo en el que es imposible predecir las cosas”, declaró ayer Basile Rochut, asesor meteorológico de la regata. Sin adelantarnos demasiado, lo que podemos decir de lo que les espera a los navegantes es que se presenta bastante «activo». Nubes cumulonimbos, tormentas violentas, lluvias torrenciales, vientos flojos y variables: el paquete promete ser completo. “Los Doldrums son siempre una zona misteriosa. Podemos esperar que vuelva por detrás porque parece que se despeja si esperamos un poco”, anunció Sébastien Simon. En otras palabras, este famoso frente intertropical podría resultar más copioso para el grupo de cabeza que para los que les persiguen, lo que podría tener el efecto de volver a apretar las filas.

Intensidad prevista

Veremos qué pasa”, dice el navegante de Sablais, que anoche se desplazó con cautela, pero sin fatalismo, unas cincuenta millas más al oeste para afinar su punto de entrada. “Los seis primeros están repartidos en 170 millas de este a oeste, en una línea casi perfecta. Sus respectivos desplazamientos van a generar huecos en determinados momentos”, asegura Pierre Hays. En las próximas horas, a partir del mediodía para Sam Gooldchild (VULNERABLE) y por la tarde para sus rivales directos, se marcará la pauta. Sobre el papel, parece que los equipos pueden esperar permanecer enredados en esta vorágine meteorológica durante no más de veinte horas aproximadamente. Sin embargo, a menudo existe un abismo entre la teoría y la práctica.

A ello apuesta también Jean Le Cam (Tout Commence en Finistère – Armor-lux), que se dirige a un punto de entrada en los Doldrums situado entre 23° y 25° Oeste.

Fuente y Fotos:

Vendèe Globe

Author

Jose Ramón Louro