VENDÈE GLOBE 2024
DALÍN, LÍDER DE LA REGATA A OTRO NIVEL
Tanto si se encuentran en medio del océano Índico -como los líderes Charlie Dalin y Sébastien Simon- como si acaban de adentrarse en él por el cabo de Buena Esperanza y el cabo de las Agujas, en Sudáfrica, la flota de la Vendée Globe se enfrenta a toda una serie de desafíos.
El dúo de cabeza está superando un monstruoso sistema de bajas presiones a su paso por las islas Kerguelen. Antes del Cabo de Buena Esperanza, la cadena de bajas presiones ya no es un camino de rosas. Y mientras varios patrones tienen que lidiar con pequeños problemas mecánicos, el problema de Louis Burton ha puesto fin a la regata y el patrón del Bureau Vallée, que terminó tercero en la última regata, ha tenido que abandonar y se dirige a Ciudad del Cabo. Tiene dañado el herraje de su estay J2, lo que amenaza la seguridad de su mástil. Sin solución posible, Burton y su equipo tomaron la decisión más difícil y el popular y duro patrón de Saint Malo se convierte en el segundo patrón de los 40 participantes que abandona en esta flota de tamaño récord.
Establecer el nivel
A lo largo de toda la flota se trata de establecer el nivel, el cursor que determina el nivel de riesgo. El estado del mar en los tramos de la corriente de Agulhas al sur y al este de la punta sudafricana ha sido especialmente duro, como también lo ha sido en la parte trasera del gran sistema de bajas presiones del que Dalin (MACIF Santé Prévoyance) y Simon (Groupe Dubreuil) están compitiendo por delante.
“Es como una montaña rusa: sube, baja, acelera, desacelera y lo bueno es que no hace falta volver a la caja para comprar el billete, ¡podemos montarnos en esto todo el día!”, resumió el defensor del título de campeón de la Vendée Globe, Yannick Bestaven (Maître CoQ V). Ya sea al norte de las islas Kerguelen o cerca del extremo sur de África, los navegantes de la Vendée Globe se enfrentan casi todos a condiciones duras y, como es habitual en el Índico, son los mares embravecidos los que dificultan el avance y hacen la vida tan desagradable.
“Llevamos dos días bastante revueltos. El barco acelera mucho y choca contra la siguiente ola. Choca en todas direcciones y no es muy agradable. Me siento como si estuviera navegando en la Raz Blanchard (la famosa regata de Alderney), salvo que normalmente todo acaba en cuestión de horas y aquí es 24/7, interminable, ¡sin parar!”, comentó Louis Duc (Five Group – Lantana Environnement), que se está viendo sacudido por la corriente de Agulhas. “Pasamos de 30 a 10 nudos en casi una fracción de segundo. Somete al barco a mucha tensión y a mí me pasa lo mismo. Tienes que estar encima o acabas en el suelo”.
Charlie Dalin 1 Monstruo Bajo 0 (HT)
Al frente de la flota, el líder de la regata, Charlie Dalin, parecía estar casi disfrutando de su regata, que ahora mismo no es contra sus rivales, sino contra el sistema de bajas presiones. En la parte trasera del centro de la baja hay olas de diez metros y brutales rachas de 60 nudos. Pero si él y Simon consiguen mantenerse por delante de lo peor del voraz sistema, las distancias ganadas serán significativas.
Dalin ha declarado hoy: “Me siento un poco cansado, necesito descansar un poco. Pero aparte de eso, estoy bien. Estoy compitiendo con este monstruo de baja presión. No está yendo demasiado mal y estoy consiguiendo mantener el ritmo, lo que es bueno. Estoy en un buen lugar ahora mismo, progresando hacia el este, cada pequeño avance hacia el este es oro puro, significa que seremos alcanzados por la baja presión más al este, lo que significa que tendré un estado del mar más pequeño y vientos menos fuertes, lo que es bueno. Así que estoy luchando duro para mantenerme por delante el mayor tiempo posible. En algún momento me atraparán, eso seguro. Pero cuanto más tarde, mejor.
“Los archivos GRIB están funcionando bastante bien, por el momento en lo que respecta a la velocidad y dirección del viento y luego estoy mirando las imágenes de satélite a través de Windy (sitio web de previsión meteorológica) y así estoy monitoreando el progreso de estos dos sistemas meteorológicos de estas dos maneras.
Es cierto que yo era el barco más al sur en ese momento, pero aún así tenía la oportunidad de cambiar al norte, pero me habría costado, probablemente me habría costado más que a los demás. Pero en cuanto a la toma de decisiones, me pasé diez horas delante del ordenador, haciendo cientos de rutas, intentando averiguar qué opción era buena y por qué razón”.
Y por todo ello el resultado puede estar aún en la balanza…..
“Todavía no sé si es una buena elección. Lo sabremos en poco más de 24 horas. Pero me ha llevado mucho tiempo tomar esta decisión. Y ha sido divertido, ha sido divertido navegar contra este monstruo. Intento no mirarle demasiado en Adrena (programa de software de enrutamiento) porque si miras demasiado ves las flechas rojas de 60kts y me digo a mí mismo ‘no quiero estar ahí’. Soy como un caballo que sólo mira hacia delante en el recorrido con las anteojeras puestas”. Intento navegar rápido hacia el este, cada metro es importante.
Lo genial es que estos veloces foilers nos permiten hacer cosas nuevas que antes sólo podías hacer con multicascos”, termina por afirmar Dalin.
Fuente y Fotos:
Vendèe Globe