VENDÈE GLOBE 2024
LOS SKIPPERS: CLARISSE CRÉMER “L’OCCITANE EN PROVENCE”
Clarisse Crémer creció cerca de París y descubrió la vela en las vacaciones familiares, luego en regatas estudiantiles durante sus estudios en HEC. El encuentro con el navegante Tanguy Le Turquais la animó a probar la vela oceánica. A los 25 años, participa en la Mini-Transat. Su rendimiento deportivo (2ª) y su capacidad para compartir sus aventuras impresionaron a todo el mundo. Continuó en la clase Figaro y luego entró en el circuito IMOCA en 2018. En 2020, compitió en su primera vuelta al mundo en solitario: tras 87 días en el mar, se convirtió en la mujer más rápida de la historia de la Vendée Globe. Nada más llegar, Clarisse solo tenía un objetivo: volver a participar en esta legendaria regata.
Esta será la segunda participación de Clarisse en una Vendée Globe, tras participar en la edición de 2020 en donde cosechó un 12º puesto, tras haber invertido un tiempo de 87d. 2h. 24m 25s. Finalizó la Transat CIC como 26ª mientras que firmaba un 16º en la New York Vendèe-Les Sables D’Olonne.
EL BARCO:
Cremer tomará parte en esta edición a bordo del “L’Occitane en Povence” en el cual embarcará como material oceanográfico Boyas de Deriva.
- Nombre anterior : “Apivia”
- Arquitecto : Guillaume Verdier
- Construcción : 2019, CDK Technologies, Lorient
- Fecha de lanzamiento : 05 Août 2019
- Eslora : 18,28 m
- Manga : 5,85 m
- Calado : 4,5 m
- Peso : 8 t
- Altura del mástil : 29 m
- Superficie vélica en ceñida : 350 m2
- Superficie vélica en popa : 560 m2
L’Occitane en Povrence:
Desde 1976, L’OCCITANE en Provence se dedica a compartir las maravillas que ofrece la naturaleza, diseñando y distribuyendo en todo el mundo productos de belleza, cuidado de la piel y bienestar, fabricados en Francia. Sabe que la Naturaleza necesita equilibrio para que cada semilla florezca de nuevo, y cree que un renovado sentido de la armonía entre los seres humanos y el medio ambiente puede fortalecer este equilibrio. La empresa cultiva el cambio. Trabaja mano a mano con equipos locales que también creen que cada gesto, por pequeño que sea, puede marcar la diferencia.